Tapiz

El cuello de botella silencioso en la innovación de las cooperativas de crédito: la fragmentación en el desarrollo de productos

Las cooperativas de crédito están innovando, pero los sistemas fragmentados ralentizan la ejecución. Las herramientas desconectadas hacen que la coordinación, y no las ideas, sea el verdadero cuello de botella. Tapestry centraliza los flujos de trabajo, automatiza la lógica y simplifica la integración, lo que permite una entrega más rápida de los productos y una experiencia más fluida para los miembros, tanto en el ámbito minorista como en el de las pymes. 

El cuello de botella silencioso en la innovación de las cooperativas de crédito: la fragmentación en el desarrollo de productos

Hay mucha actividad en el mundo de las cooperativas de crédito en Estados Unidos. Están tratando de modernizar sus servicios digitales, expandirse a segmentos en crecimiento y responder a las crecientes expectativas de sus miembros. Muchas ya tienen ideas claras: una mejor incorporación, procesos de préstamo más flexibles o nuevos productos para pymes. El reto rara vez radica en definir qué construir. Radica en cómo todo encaja entre bastidores.

La mayoría de las instituciones siguen trabajando con un mosaico de sistemas, proveedores y herramientas. Con el tiempo, este entorno fragmentado se convierte en la principal razón por la que los proyectos tardan más de lo previsto.

Cómo la fragmentación ralentiza el trabajo diario

Una cooperativa de crédito típica funciona con una combinación de plataformas: un sistema central, una capa de banca digital, LOS/LMS, herramientas de verificación, proveedores de pagos y código interno que los conecta. Cada sistema tiene un propósito, pero el desarrollo de productos casi siempre afecta a varios a la vez. Un nuevo flujo de incorporación o proceso de concesión de préstamos desencadena actualizaciones en varios equipos y plazos.

Esto introduce una sobrecarga de coordinación. Incluso un pequeño cambio debe coordinarse con diferentes proveedores, probarse en diferentes sistemas y sincronizarse con sus respectivos ciclos de lanzamiento. Lo que debería ser una simple actualización se convierte en un esfuerzo de varios pasos.

Por qué la orquestación es el verdadero reto

Es natural suponer que la dificultad radica en la integración de los sistemas. En realidad, lo más complicado es la coordinación: decidir cómo interactúa cada parte de un flujo de trabajo y garantizar que todo el proceso se desarrolle de forma coherente.

La orquestación incluye:

  • Decidir cuándo y cómo se ejecuta la verificación
  • Mantener sincronizados los canales digitales y el núcleo
  • Coordinación de pagos, comprobaciones de riesgos y notificaciones.
  • Gestionar casos extremos que no se ajustan a las rutas estándar.
  • Actualizar la lógica sin crear efectos secundarios en otros lugares.

Aquí es donde se pierden tiempo y recursos. Los flujos de trabajo de las pymes lo hacen aún más complejo. Implican documentos adicionales, más puntos de datos y una combinación de pasos automatizados y manuales. Muchos de sus sistemas existentes nunca se diseñaron para ese nivel de variabilidad, por lo que los equipos de producto acaban compensando las deficiencias.

¿Por qué el impacto es mayor para las cooperativas de crédito?

Los bancos más grandes pueden absorber esta complejidad porque cuentan con equipos más amplios y herramientas especializadas. Las cooperativas de crédito suelen trabajar con grupos más reducidos que se encargan tanto de las operaciones como de la entrega de productos. Cualquier fricción en el entorno de desarrollo ralentiza directamente la ejecución.

Al mismo tiempo, las expectativas están aumentando. Los miembros comparan su experiencia con la banca digital con otras aplicaciones digitales que utilizan a diario, no solo con otras cooperativas de crédito. Los usuarios minoristas están acostumbrados a actualizaciones rápidas, interfaces limpias y respuestas instantáneas. Los clientes de pymes esperan una incorporación sencilla, decisiones de crédito más rápidas y un autoservicio fiable. Estas expectativas están determinadas por los servicios modernos de Internet, no por los sistemas financieros tradicionales.

Competir con ese ritmo se vuelve difícil cuando cada producto depende de varios sistemas desconectados.

Donde Tapestry cambia la ecuación

Aquí es donde un enfoque diferente puede ayudar. Tapestry no sustituye al núcleo de una cooperativa de crédito ni a sus socios actuales. Proporciona un entorno en el que la lógica empresarial y el diseño del flujo de trabajo realmente cobran vida, en lugar de estar dispersos en múltiples sistemas.

Hay tres elementos que lo hacen posible: la creación de flujos de trabajo asistida por IA, los bloques financieros reutilizables y una capa central que gestiona las interacciones API. Los equipos describen el proceso que desean crear y Tapestry genera un flujo de trabajo completo utilizando componentes que ya comprenden las acciones bancarias típicas, como la verificación, los pagos, el enrutamiento o los cheques. Estos componentes se comportan de la misma manera en diferentes productos, por lo que las mejoras realizadas una vez pueden servir para múltiples procesos.

Las interacciones API se gestionan en un solo lugar. Esto incluye cómo se mueven los datos, el orden en que se ejecutan los pasos y cómo se sincronizan los diferentes sistemas. Esto elimina gran parte del trabajo de integración que normalmente ralentiza a los equipos.

El resultado práctico es sencillo: los flujos de trabajo de las pymes y el comercio minorista se pueden diseñar y actualizar en una sola vista; las normas de suscripción se ajustan más fácilmente; el departamento de cumplimiento normativo obtiene una imagen clara del comportamiento del proceso; y los canales digitales reflejan las actualizaciones sin tener que esperar a múltiples proveedores.

En resumen, Tapestry elimina la duplicación y el trabajo manual que ralentizan la mayoría de los proyectos, lo que proporciona a las cooperativas de crédito una vía más clara para crear y mejorar productos con una eficiencia mucho mayor y ciclos de entrega más rápidos.

Reestablecer las bases para la innovación

Las cooperativas de crédito cuentan con la mayoría de los ingredientes adecuados: las señales del mercado, la intención, las ideas y el enfoque. Lo que las frena es la estructura fragmentada sobre la que se ven obligadas a construir. Mientras los flujos de trabajo y las normas se encuentren en diferentes sistemas, la prestación de servicios se percibirá como lenta e impredecible.

Un enfoque unificado elimina gran parte de esta fricción. Aporta más estabilidad a la expansión del negocio, simplifica los cambios en los recorridos de los miembros y da a los equipos espacio para centrarse en las ideas en lugar de en la coordinación.

Las cooperativas de crédito que refuercen esta base tendrán más facilidad para adaptarse y mantenerse al día con las expectativas tanto de los socios minoristas como de las pequeñas empresas. Aquellas que sigan trabajando con estructuras fragmentadas tendrán más dificultades para llevar a cabo cada nueva iniciativa.

¿Quieres descubrir cómo Tapestry puede ayudarte? Reserva una demostración ahora>> 

Dejar una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *.

11 + dos =